Hace algunos años el Dr. Masaru Emoto presentó fotos que muestran cristales de agua congelada después de que ésta haya sido expuesta a diferentes estímulos no-físicos.
Si bien no se generó una acción medible, sí se modificó el tamaño y forma de los cristales de agua, primero ante estímulos musicales (desde clásica hasta heavy metal), y después al colocar en botellas de agua carteles que expresaran distintas emociones e ideas humanas (como 'gracias', 'amor' o 'me vuelves loco; te mataré').
Las moléculas de agua con los mensajes positivos tomaron formas bellas, mientras que en las botellas etiquetadas con mensajes negativos se vieron cristales desagradables y malformados.
Hoy comparto con ustedes el cristal que generó la sinfonía nº40 de Mozart. ¿No es hermoso?
Teniendo en cuenta que la mayor parte de nuestro planeta es agua, y que entre el 70 y el 90% de nuestro cuerpo está compuesto también por agua...
¿Cuánto influyen realmente nuestros pensamientos? ¿Cuánto nos embellece un 'gracias'? ¿Qué etiquetas nos ponemos cada día?
lunes, 27 de octubre de 2008
lunes, 20 de octubre de 2008
lunes, 13 de octubre de 2008
lunes, 6 de octubre de 2008
enjoy the silence
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